El término deepfake surgió por primera vez en 2017 para describir fotos, audios, videos y otras falsificaciones realistas generadas con IA

En la encrucijada de la realidad y la ficción, donde los píxeles se transforman en ilusiones y la verdad se vuelve mentira, surge un nuevo invento digital: Las DeepFakes, son como camaleones digitales, capaces de mentirte con cualquier rostro, voz o escena. Un día, vemos a un político pronunciando un discurso que nunca hizo, y al siguiente, a nuestra estrella de cine favorita protagonizando una película que nunca existió. La línea entre lo auténtico y lo falso se difumina, y nuestra percepción de la realidad se tambalea.

Las raíces de sus inicios

El término "deepfake", que fusiona "deep learning" y "fake", fue introducido por primera vez en 2017 por un usuario anónimo de Reddit que empezó a crear y compartir vídeos falsos de famosos. Sin embargo, los verdaderos yacimientos de lo que es una deepfake se remontan a finales de la década de 1990, cuando los investigadores académicos comenzaron a explorar el concepto de sustitución facial digital.

La tecnología no sólo ha facilitado la creación de filtros de Instagram para cambiar de lugar el rostro de dos personas

Son productos de la inteligencia artificial, concretamente de los algoritmos de aprendizaje profundo, que tienen el poder de crear contenidos falsos increíblemente realistas, como imágenes, audio y vídeos. Estos medios generados por la IA pueden ser tan convincentes que a menudo son difíciles de distinguir de imágenes o sonidos reales.

¿Como se crea el enemigo de la verdad?

Las redes generativas adversarias (GAN) son la base de las deepfakes. Estas redes neuronales compiten entre sí para generar imágenes o videos cada vez más realistas. Una red crea el contenido falso, mientras que otra lo evalúa y proporciona retroalimentación para mejorar la generación. Con el tiempo, las deepfakes se vuelven indistinguibles de la realidad.

De esa manera, uno se retroalimenta del otro y el procedimiento se hace todas las veces que sean necesarias hasta que el segundo algoritmo no encuentre datos falsos.

El trato de Latinoamérica con las deepfakes

Entre 2022 y 2023 el número de deepfakes en todo el mundo se multiplicó por diez y solo en la región de Latinoamérica aumentaron un 450 % en ese periodo, según un informe de Sumsub. Los sectores más afectados, por su naturaleza propia y alcance, fueron, y seguirán siendo, el periodismo, la política, el entretenimiento, y las finanzas.

¿Como detectarlas?

Según el portal web EfectoCocuyo, existen las siguientes técnicas más analógicas que podemos utilizar para detectar una deepfake: 

  • Cuando veas un video, presta atención al rostro de las personas. Si los músculos de la cara hacen movimientos repentinos o que no parecen naturales, es posible que se trate de una deep fake.
  • Si esta técnica está mal empleada, podrás ver un cuadrado alrededor de las facciones del rostro y notar los cambios de las facciones. 

  • La desinformación se combate con una ciudadanía activa dispuesta a verificar. Contrasta las declaraciones de los poderosos con lo reseñado en varios medios digitales confiables, así como en las cuentas de las personas aludidas. Consulta portales que se dediquen a hacer fact-checking.